El ocle del otoño comienza a llegar arrancado por las fuertes mareas de los fondos submarinos. Los vientos y las corrientes decidirán que arenales y calas recibirán más cantidad. Estos días la cala de "El Conexal", bajo el camping de Peran, es una de la favorecidas.
Es un trabajo duro que no admite demoras y el tiempo o las mareas pueden dificultar la recogida. Con el paso de los años, la maquinaria ha dulcificado la dureza de "un oficio" que antaño se realizaba "completamente a mano", igual que lo hacen estos jóvenes recolectores en el Conexal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario