FOTO: Central Térmica de Aboño. EDP
"NOS PERMITIMOS SUGERIR A EDP (QUE HASTA SEPTIEMBRE DE ESTE AÑO HA DECLARADO UN BENEFICIO DE 736 MILLONES DE EUROS) QUE DE SUS GANANCIAS DESTINE UNA CANTIDAD A AMPLIAR LA PARTIDA PRESUPUESTARIA DEL CONSISTORIO CARREÑENSE PARA ALIVIAR LA POBREZA ENERGÉTICA DE LOS HABITANTES DE NUESTRO CONCEJO".
La pobreza energética viene derivada de dos hechos incuestionables:reducción significativa de los ingresos salariales y aumento disparatado del precio de la energía. La factura de la luz subió un 60% desde 2007, mientras que las rentas bajaron un 8,5%, lo que se traduce en que las familias tienen que destinar un porcentaje cada vez mayor de sus ingresos a pagarla. Por el contrario las compañías eléctricas han experimentado un aumento de sus beneficios que en algunos casos alcanzan el 79%.
Veamos el caso de EDP España, multinacional propietaria de la asturiana Hidroeléctrica del Cantábrico, de origen portugués, en la que participan sociedades chinas, norteamericanas, argelinas e incluso asturianas (en una sociedad compartida por la Corporación Masaveu y Liberbank, que controla el 7,19% del accionariado) y que es propietaria, entre otras, de las centrales térmicas de Soto de Ribera y de Aboño. Hasta septiembre de este año EDP ha declarado un beneficio de 736 millones de euros.
La térmica de Aboño está asentada en nuestro municipio, utiliza nuestra agua, nuestro suelo y nuestro aire, y hay ejemplos notorios del mal uso de estos tres elementos, con perjuicios evidentes para la calidad de nuestro medioambiente. Algo que no merma las ganancias de la multinacional y sí los del bolsillo del sufrido consumidor obligatorio de su producto, que teniendo como vecino a aquel que se lucra de su patrimonio natural, no obtiene a cambio ningún beneficio, sino todo lo contrario.
Cuando aquella familia bien, venida a menos, de principios del siglo pasado, se reunió para intentar aliviar su situación reduciendo gastos, acabaron decidiendo que de lo único que iban a prescindir era del chocolate que cada día le daban al loro. Nos permitimos sugerir a EDP que siga este ejemplo y que el porcentaje correspondiente al dulce manjar del que disfrutaba el ave, en un montante de 736 millones de euros, se traduzca en una cantidad destinada a ampliar la partida presupuestaria del Consistorio Carreñense para aliviar la pobreza energética de los habitantes de nuestro concejo.
El marketing está asegurado, además del pertinente lavado de conciencias y lo más importante: ninguna familia de nuestro municipio pasará frio este invierno.
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