domingo, 18 de agosto de 2013

Cinco largos meses fuera de casa

...................VIVIENDA DE ALICIA PRENDES P. MARITIMO Foto: A.VV. de Candás 
“Estamos pagando con salud un error que no es nuestro”, afirma la propietaria de la vivienda afectada por el argayo de marzo en el paseo marítimo de Candás

Alicia Prendes está sentada en una terraza del puerto candasín. Desde allí, en un día cualquiera, puede verse su casa, vallada, en el paseo marítimo y con un cartel amarillo en el que se advierte: «¡Atención! Peligro de desprendimientos. Peatones, circulen con precaución». Sin embargo, ayer una hilera de camiones le impedían, «afortunadamente» ,obtener esa imagen. «No puedo ni mirar hacia allí. Lo paso fatal», dice. Y no es de extrañar, teniendo en cuenta que esta candasina, de 60 años, y su familia lleva ya cinco meses fuera de su vivienda, después de que el pasado 17 de marzo un argayo en el Monte Fuxa les obligase a desalojarla.

Desde entonces, Alicia Prendes no puede pensar en otra cosa que no sea en aquel día y en esos cinco años que llegó a estar lejos de su hogar en el año 2000 a raíz de otro desprendimiento. Por aquel entonces, asegura, que aún era luchadora y tenía fuerzas suficientes como para hacer frente a esa pesadilla. Sin embargo, ahora, esta candasina, de 60 años, vive un momento de flaqueza y reconoce que «ya no puedo más. 

Es horrible, es una injusticia. Mi familia y yo estamos nos sentimos como si estuviéramos llevando una carga que no nos pertenece, que no es nuestra, porque no somos ni los dueños del monte ni del edificio colindante, que según los técnicos ocasionó el argayo», lamenta nerviosa, para seguir diciendo, tras un breve suspiro: «Estamos pagando un error que no es nuestro, económicamente y también con parte de nuestra salud... Tenemos la moral por los suelos», agrega. Por eso, «me preguntó todos los días, ¿dónde están las protectoras de personas? Porque es horrible tener que dormir fuera de la que durante tantos años fue tu casa», apunta.

Así las cosas, su día a día transcurre ahora lejos del mar y del sonido de las olas con las que se crió, entre las cuatros paredes de un piso que ella y su marido han tenido que alquilar. Pero esta no es la única vivienda que tienen que costearse; también está la de sus dos hijos, ya que «no encontramos ningún piso que tuviera cuatro habitaciones», explica. Aún así, «tengo que agradecer que la propietaria de los inmuebles no nos haya puesto ninguna traba y aún firmando un contrato de un año podamos estar los que necesitemos. Porque puede parecer una tontería, pero para nosotros eso es mucho, ya que no sabemos el tiempo que vamos a estar aquí», manifiesta. Pero, desde luego, no cinco años como la vez anterior. O esa es, al menos, su esperanza por muy dura que sea la realidad, ya que la situación tampoco ven que mejore. 

«¿Evolución? Ninguna. Sólo nos hacen perder el tiempo y el dinero. Por eso a veces hasta me planteo en coger y meterme en casa para a ver si así hacen algo», comenta indignada. Pero no es la única. Muchos vecinos de la villa marinera exigen que se reabra el paseo marítimo y que se tomen cartas en el asunto. Y con esa idea, la Asociación de vecinos de Candás y varios partidos políticos se sumarán a una manifestación el próximo sábado, día 24, bajo el lema «Carreño no puede seguir así».

La casa de «El Carioco», como es conocida la vivienda de Alicia Prendes, se levantó en el año 1940 junto al Monte Fuxa. Sin embargo, «nunca había caído una piedra». Nunca hasta el año 2000, cuando se produjo el primer desprendimiento, justo después de la construcción de un bloque de apartamentos en el terreno colindante.

Ese primer desprendimiento les «destrozó» cinco años de su vida, pero acabaron volviendo. Y sin tiempo de pensar en si algún día la pesadilla volvería, los desprendimientos se repitieron este año. Y todo, a pesar de que en 2010 Prendes y su familia avisó de que parte del monte «podría venirse abajo en cualquier momento». Así fue y hoy cumplen ya cinco meses fuera de casa. Por eso, Alicia Prendes concluye, batida: «Llevamos cargando trece años con una mochila que no es nuestra, que nos la han puesto». 

Mónica Salas
Se repite la historia
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Se repite la historia con las mismas actitudes políticas y los mismos responsables políticos.. llevándolo al escenario de lo teatral: LA MISMA OBRA, EL MISMO DIRECTOR Y DISTINTOS ACTORES. engaños.. más engaños ... y que pase el tiempo.

AÑO 2000: Las excavaciones para la construcción del bloque de viviendas colindante con la vivienda de Alicia Prendes, descalzan el monte, y éste se viene abajo sobre la casa de Alicia. 

El informe elaborado, entonces, por el ayuntamiento de Carreño, ACHACA la caída del monte a las excavaciones de las obras mencionadas, dicho sea de paso estas excavaciones carecían de informe-estudio geológico preceptivo. Transcurridos unos días del incidente, el ayuntamiento inexplicablemente cambia el informe inicial en el que se reflejaba que la caída del monte era consecuencia de las obras y emite un nuevo informe ACHACÁNDOLO A CAUSAS NATURALES. 

Esto nuevo informe aboca a la propietaria a una larga y costosa carrera judicial y estar fuera de su casa 5 años. Finalmente la justicia da la razón a la propietaria en la causa del desplome del monte POR LAS OBRAS.Condenando a la empresa ejecutora. 

AÑO 2013: el 17 de marzo se produce un nuevo argayo.El Gobierno municipal promete una actuación inmediata, se habilita un presupuesto y se actuaría YA en la limpieza el material caído sobre la casa, transcurridos unos días las obras no comienzan y lo que comienza es un juego de entretenimiento de esta familia: Problemas con las empresas que realizarán la obra. En palabras de la alcaldía, el no comienzo de las obras obedece a que las empresas ejecutoras pedían un documento que las exonerase de toda responsabilidad sobre la vivienda (dudosa esta petición). 

La propietaria tiene ofertas de diversas empresa para hacer la limpieza sin esta exigencia, ni ahora, ni en las obras del argayo del año 2000 se le ha pedido la firma de documento alguno. Más adelante, y de ésto han pasado cuatro meses, a la propietaria se le comunica desde el ayuntamiento que tienen tres proyectos de obra, y que están en el proceso de elegir uno.. HASTA HOY ESPERANDO. nunca se la han mostrado o dado a conocer estos proyectos.

En todo este tiempo Alicia Prendes ha encargado y pagado el estudio geológico y técnico sobre la ladera del monte y la situación de seguridad de su vivienda, así como las actuaciones que hay que realizar. Nada tienen que ver con las afirmaciones públicas del gobierno municipal sobre la situación de alto riesgo de la vivienda.Toda esta " medida estrategia" de los responsables municipales va orientada a acorralar a esta familia para que  se vea obligada a adoptar decisiones sobre la situación del monte y la vivienda, y de esa manera quitarse "el  muerto " quienes tienen la responsabilidad  de actuar , y que desde hace 5 meses no han hecho nada más que buscar responsabilidades ajenas y no asumir las propia y  aislar a un  pueblo con el cierre del paseo , Responsabilidad que no es de la familia de Alicia Prendes, de esta familia solo su casa es su responsabilidad.  QUE MISERABLE ES ACORRALAR A LAS PERSONAS PARA OBTENER UN BENEFICIO FRENTE A LA PASIVIDAD Y LA INACCIÓN  

TODO NUESTRO ÁNIMO Y APOYO A ESTA FAMILIA Y TRASLADARLES.. QUE NO ESTÁN SOLOS

...............MOMENTO DE LA CONCENTRACIÓN DE APOYO - Foto: El Comercio 14 de abril de 2002
El 14 de abril de 2002 la Asociación Vecinal de Candás convocamos una manifestación de apoyo a la familia candasina de La Carioca con el fin de que les sean reparados los daños ocasionados en la vivienda y puedan regresar a su casa.

Seguiremos informando

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La justicia no existe!, además, ¿que estaba primero el monte o la casa, la casa o el monte, llego alguien un día y dijo voy a poner un monte detrás de la casa?.

Olga dijo...

Menuda tontería que acabas de decir, para ti mejor que no existieran ni casas, ni carreteras, nada edificado, solo los montes, los prados, el mar y tu bajo las estrellas, pero seguro que vives en una casa construida donde antes había una tierra y vas en un coche por donde antes sólo existía la hierba, las flores... No sigo que me emociono, yo vivo en una casa, antes había un solar, soy Atila.