Hola.. muchas personas nos comentan cuanto echan de menos ese banco corrido de hormigón que se ve al fondo sobre el espaldón de La Buraca. Era lugar de cita de la vecindad, de encuentro y saludo, de reunión y mariaxe. Un sitio privilegiado con todo el pueblo delante y toda la mar detrás, abrigado del nordeste del verano, ideal para recibir el sol de invierno, que calentaba la piedra del espaldón y daba gusto arrimarse allí.
💞 Son pequeñas historias de pueblo, de signos de identidad... de vez en cuando un poco de nostalgia no viene mal.
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