lunes, 20 de mayo de 2013

Pipo Prendes es un adicto al muelle candasín

..............PIPO PRENDES Foto: Mónica G. SALAS 
El cantautor se declara enamorado de la villa, que considera la “capital del mundo” y transmisora de un sonido “único” 

“Un paso más para disfrutar la vida, un paso más, que no te cuenten mentiras, que nada está perdido mientras vivas, apúntate a las ganas de vivir”. Pipo Prendes desborda optimismo, alegría, esperanza, ánimo, ilusión, entusiasmo... Y no sólo en su último disco, del que salen estas palabras, sino también en un café en el puerto candasín. Una conversación de poco más de una hora da para mucho tratándose del cantautor y empresario. 

Y más si el tema que se aborda es Candás. La villa marinera, en la que nació hace 57 años, es protagonista de muchas de sus canciones, en las que deja entrever su propia personalidad, así como sus vivencias y pasiones. Por eso, cada letra, cada sintonía dice algo de Candás, sí, pero también de Pipo Prendes. Y sin necesidad de grandes análisis, una cosa queda clara: ama profundamente a su pueblo, hasta el punto de que Candás, como bien dice, es para él la capital del mundo. Y no sólo eso, sino también la transmisora de un sonido único, “de habaneras, tangos, country y copla”, que el cantautor persigue interpretar con su música. Y así, aunque el nombre de su pueblo no aparezca directamente reflejado en una canción, Candás siempre está en el fondo de todo lo que canta. 

En la villa marinera busca tranquilidad, paz y silencio, después de días de bullicio y estrés en Madrid y otras ciudades del mundo, a donde viaja por eso de ser empresario también. Precisamente en una de sus últimas escapadas aprovechó para “mover” en México su último disco, “...Un paso más”, y en el que le dedica también la canción “Bailando en México”. “Uno de mis objetivos ahora mismo es poder llegar a editar el disco allí”, comenta ilusionado, al tiempo que anima a los creadores a tener esperanza. “Estamos en un momento difícil, en el que hay pocas ventas. Por eso, creo que tenemos que aprovechar el mundo informático. De hecho, mi último disco ya está en todas las plataformas digitales”, explica. 

Pero de esos viajes, Pipo Prendes saca mucho más. Lo mejor, diría él, porque estar lejos de su patria también le da más fuerzas para regresar a Candás. “Hay que salir para desear volver continuamente”, expresa. Porque como dice en una de sus canciones: “Ay Candás no hay nadie que se atreva a olvidarte”. Y prosigue: “Que se oiga en todas partes, que sepan que tú estás más viva que la vida. Que quiero estar contigo y mi amiga es la mar”. 

Un paseo por el puerto, desde donde poder contemplar esa mar, es algo mágico para Pipo Prendes. La entrevista transcurre en este espacio y con la mirada puesta en las olas, el cantautor afirma: “Soy un yonqui del muelle. Camino por él y me río, siento que me perdona... Es como mi otro yo”. No obstante también se considera un enamorado de Perlora. De hecho, “la mayoría de las canciones de “...Un paso más”, son fruto de mis paseos entre Candás y Perlora”, asegura. 

Pero, ¿y cómo empezó a cantar Pipo Prendes? “Desde muy crío ya me di cuenta de lo mio era la música. Cantaba todos los días con mi pandilla en el verano en la Almena del muelle y luego con mis amigos José Ramón, Juan Pola y Chemary imitábamos a los “Beatles” en casa de uno de ellos. Cogíamos palos como si fuesen guitarras y hacíamos que tocábamos, pero lo cierto es que yo sentía que esos palas sonaban de verdad. Era algo mágico”, relata. Pero fue con la escolanía de Candás cuando el pequeño Pipo empezó a destacar. “Allí todo eran canciones y música, así que me pasaba todo el día entre melodías”, apunta. Y entre melodías continúa ahora. Pero no sólo él, también sus amigos. Con antiguos escolanos tiene un grupo, que fue creado en 1984 bajo el nombre de “Gabiana”. 

Por aquel entonces José Manuel Pérez Pantiga ya era Pipo. Porque por si alguien no lo sabe, el nombre que figura en su DNI es: José Manuel Pérez- Prendes Pantiga. “Cuando saqué mi primer disco me dijeron que si no tenía un apodo que sonara más. Y les gustó Prendes, mi tercer apellido y al que luego incorporé en mi nombre”, explica. A partir de ahí en sus canciones comenzó a figurar el nombre de José Manuel Prendes hasta que decidió cambiarlo por el de Pipo Prendes. Porque, “yo soy Pipo total. Es más, sólo soy Pipo”, matiza. 

Y bajo el nombre de Pipo Prendes actuará el 7 de junio en Gijón, en el homenaje a Manolo Preciado con la inauguración de la estatua realizada por otro candasín: Vicente Santarúa. Allí, interpretará su canción dedicada al querido entrenador del Sporting. Pero antes de este acto, el cantautor estará en el Teatro Jovellanos el 26 de mayo y el 27 colaborando con la Fundación Esther Koplowitz. De cara al verano, “me gustaría poder ofrecer en Candás un concierto con mis últimas canciones”, señala. 

Un concierto que seguro que todos los candasinos y candasinas esperan con ilusión y en el que escucharán palabras como estas: “Un paso más, tu sonrisa es la mía, un paso más, muera la melancolía, resiste con la mar embravecida, resiste que al final vas a ganar...”.

 Mónica G. SALAS La Nueva España » Centro

1 comentario:

Anónimo dijo...

Supongo que estará enamorado del Candás de antes, porque lo que es el de ahora da pena dolor y fatiga. Ta todo manga por hombro y de Perlora ya ni hablamos es un vertedero de suciedad y esta todo abandonado empezando por el acceso a las playas que dan pena hasta que un día pase algo al aguien (Dios no lo quiera)y entonces ya será tarde.